«¡Uy! Hoy toca pescado.» ¿Cuántas veces has dicho esta frase? Seguro que la has soltado antes de saber si el pescado te gusta o no. El pescado tiene una cosa en común con el chocolate o con la carne: existen muchas variedades y se puede cocinar de diferentes maneras. El gusto de la sardina no es el mismo que el del rape. Y el atún no tiene nada que ver con la sopa de marisco. Pasa página y pronto dirás: «¡Uau, hoy toca pescado!»?